La carne es todo un reto al cocinar, pues muchas veces así nos esforcemos para que el sabor sea delicioso, la textura no es la mejor y durante la cocción se endurece. Para evitar que esto pase es necesario asegurarse desde que la compramos que es una carne apta para la preparación que planeamos (asada, cocida, al vapor, frita) y ¡claro! Ayudarnos con algunos truquitos que te contamos a continuación.
AL COMPRAR LA CARNE:
Asegúrate de que la carne que busques en el mercado no esté cortada con la misma dirección que la fibra así será más fácil de masticar. Además, asegúrate de que esté fresca, que tenga un color rojo y que los bordes sean de color crema; si son muy oscuros seguramente sea de un animal viejo y será, después de cocinarla, muy dura.
ANTES DE COCINAR
La carne puedes quitarle la grasa que tenga alrededor pues al cocinarse, esta puede llegar a causar deformaciones tensando las fibras y haciendo que la porción de carne se endurezca.
DAR GOLPES SUAVES A LA CARNE QUE VAYAS A COCINAR
Antes de ponerla en el fuego puede ayudar a que esté más tierna. Puedes usar un rodillo de amasar, el lomo de un cuchillo o conseguir un martillo de cocina (especialmente diseñado para ello). Lo importante es que con estos golpecitos se romperán algunas de las fibras de la carne y de esta forma conseguirás que la porción se cocine mejor y a la hora de servirla esté muy tierna.
SASONAR LA CARNE
Una buena idea, que no solo dejará la carne más tierna, sino que también con un delicioso sabor es marinarla. Primero, debes preparar una mezcla de aceite vegetal, zumo de limón y hierbas aromáticas. Segundo, una vez la mezcla esté lista, debes poner allí la porción de carne que vas a usar en tu receta. Es importante que tengas en cuenta que si los trozos de carne son muy pequeños o si la dejas marinando mucho tiempo puedes lograr el efecto contrario y la carne se endurecerá. (El marinado debe ser entre 6 y 12 horas, según el tipo de carne).
MARINAR LA CARNE
Hay expertos en cocina que recomiendan dejar la carne marinar en cerveza durante un par de horas antes de cocinarla. Además de ablandar las fibras, le da un muy buen sabor, especialmente si la vas a poner en la parrilla.
LA TOCINETA Y LA CARNE
Un truco que da muy buenos resultados tanto a la hora de ablandar la carne como a la de darle muy buen sabor es envolver algunas tiras de tocineta en las porciones de carne. La grasa que suelta la tocineta vuelve la carne más jugosa y blanda.
JUGO DE PAPAYA Y DE PIÑA PARA LA CARNE
Aunque parezca increíble, los jugos de papaya y de piña (incluso las cáscaras) pueden ser excelentes para ablandar la carne. Basta con ponerle un poco de cualquiera de los dos a la carne un par de horas antes de cocinarla.
Estos sencillos consejos te garantizarán que la carne en tus recetas sea la protagonista, no solo por el buen sabor. También por su textura tierna y jugosa. Ya no hay nada que temer… manos a la obra y ¡a sorprender a todos en la mesa!
