¿Alguna vez te has preguntado qué es lo que hace que los alimentos sean tan importantes para nuestra salud? La respuesta está en los tipos de nutrientes que se encuentran en ellos.
¿Qué son los nutrientes y por qué son importantes?
Básicamente, son sustancias esenciales que el cuerpo necesita para funcionar correctamente. Por lo tanto, mientras más variada y equilibrada sea tu dieta, mejor cubrirás las necesidades de todos los tipos de nutrientes.
Ten presente que el aporte adecuado es fundamental en todas las etapas de la vida, ya que contribuye a reducir el riesgo de enfermedades crónicas, protege de la malnutrición en todas sus formas (desnutrición, sobrepeso y obesidad infantil), favorece el crecimiento y desarrollo saludable, entre otros beneficios (MinSalud, s.f.; UNICEF, 2022).
¿Qué funciones cumplen en el cuerpo los diferentes tipos de nutrientes?
A modo general, realizan tres funciones (FAO, s.f.; MinSalud, s.f.):
Energética: algunos nutrientes proporcionan energía, la cual es el combustible para realizar las actividades del día a día y desarrollar correctamente todas las funciones corporales.
Reparadora: los nutrientes intervienen en la reparación de tejidos, así como en la formación de hormonas, células, músculos y órganos.
Reguladora: ayudan a mantener en equilibrio las funciones corporales y de esta manera contribuyen a reducir el riesgo de enfermedades.
¿Cuáles son los tipos de nutrientes?
Se dividen en dos categorías: micronutrientes y macronutrientes (FAO, s.f.). Veamos (FAO, s.f.; MedlinePlus, 2021; MinSalud, s.f.; OMS, 2018):
Micronutrientes
Vitaminas: son esenciales para mantener la salud y se agrupan en dos categorías. Las liposolubles (K, D, E y A) las encontramos en alimentos como frutas, verduras, yema de huevo, leche y sus derivados, aceites de maíz, girasol, entre otros. Mientras tanto, las hidrosolubles (complejo B y vitamina C) las podemos obtener de frutas, verduras, leche y productos lácteos enriquecidos, carnes magras, entre otros.
Minerales: están a cargo de numerosas funciones dentro del organismo. Entre estos se encuentran el hierro, calcio, sodio, potasio, zinc y magnesio. Alimentos como la carne roja, los vegetales de hoja verde, leche y otros productos lácteos proveen minerales.
Macronutrientes
Proteínas: su función principal es formar, reparar tejidos y mantener la estructura en músculos y huesos. Puedes encontrarlas en legumbres, cereales, carnes, pescado, leche, huevos y algunos vegetales.
Carbohidratos: estos tipos de nutrientes constituyen generalmente la mayor porción de la dieta y son la principal fuente de energía para todas las células. La ingesta de carbohidratos simples como el arroz, el pan blanco y la pasta debe limitarse; debemos preferir los carbohidratos complejos como la quinua, el arroz integral, la avena y las frutas.
Grasas: son fundamentales para la absorción de vitaminas liposolubles. Además, aportan energía; aproximadamente 9 kilocalorías por cada gramo. Se clasifican en saturadas, trans e insaturadas. La OMS recomienda que no más del 30% de la ingesta calórica diaria se obtenga de las grasas y, de estas, máximo el 10% sea de tipo saturada y menos del 1% sea trans. Las podemos encontrar en alimentos como aceite de origen vegetal, frutos secos, leche y sus derivados, entre otros.
Otro nutriente esencial es el agua, ya que ayuda a mantener la temperatura corporal y a transportar los nutrientes a todas las células. Asimismo, favorece la eliminación de desechos del organismo (FAO, s.f.).
Como hemos podido conocer, es fundamental una alimentación variada y equilibrada para aportar a nuestro organismo los diferentes tipos de nutrientesstrong> que necesita. ¡Así que te invitamos a incluirlos en tu dieta!
Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura [FAO]. (s.f. a). Macronutrientes: carbohidratos, grasas y proteínas. https://www.fao.org/3/w0073s/w0073s0d.htm