Queso parmesano: anímate a incluirlo en tus preparaciones

Cuando se habla de pasta, indudablemente se piensa en Italia y en el queso parmesano, ¿no es verdad? El aroma, sabor y textura de este derivado lácteo ha conquistado paladares de generación en generación.>

Sabemos lo importante que es nutrir el futuro y lo que un buen queso puede lograr; por eso, en este artículo te queremos contar sobre este infaltable en la despensa. Así que, ponte cómodo, porque sí, vamos a viajar por las profundidades de este famoso queso italiano.

Queso parmesano y sus entrañables curiosidades

Para hablar del queso parmesano primero tenemos que referirnos al queso como tal. En términos históricos se dice que el queso es uno de los alimentos más antiguos del planeta. De hecho, se cree que fue inventado gracias a la domesticación de las ovejas y cabras. Esto sucedió entre los años 8000 a.C y 3000 a.C., en un periodo conocido como el Neolítico (Kindstedt, 2022).

Gracias a su descubrimiento, los agricultores y habitantes pudieron crear un sustento. Después, con la llegada del Medioevo, los monjes antiguos comenzaron a explorar con diversos tipos de leche. De esa forma, desarrollaron prácticas de fabricación de queso y procesos de maduración (Kindstedt, 2022).

A través de esos pasos e innumerables intentos fue que los quesos tipo parmesano, roquefort o muenster llegaron para quedarse. Pero enfoquémonos en nuestro protagonista después de este interesante contexto: el queso parmesano primero.

Quién lo creó y dónde nació el queso parmesano

Como te contamos arriba, los monjes fueron los artífices de este alimento. En el caso de este queso, fueron los monjes católicos los que le dieron vida. Su entrada a las cocinas de Italia fue en el siglo XIII. Este hecho tuvo lugar en el norte de Italia en los monasterios benedictinos de las ciudades de Módena, Reggio Emilia, Parma y Bolonia (Aleteia, 2023).

A través de una técnica que lograba conservar por más tiempo el queso hecho con leche de vaca, fue que el parmesano tuvo su creación. De ese modo, a partir de los efectos conservantes de la sal, y otros ingredientes, se le dio la bienvenida a uno de los quesos favoritos.

El primer documento oficial que evidencia la comercialización del queso parmesano primero es del año 1254. Allí se registró la venta del caseus parmensis a un comerciante de Génova.

Posteriormente, en el siglo XVII, se masificó la producción de este queso. En Italia, en 1954, se introdujo una ley para defender los productos que procedían de determinadas zonas (Aleteia, 2023).

¿A qué se debe que sea el favorito en las despensas?

La popularidad que tiene el queso parmesano primero no es porque sí o tan obvia como parece. Pues, principalmente, entre muchos de los derivados lácteos, su sabor y textura realzan los atributos de muchos platos. También, porque su cuidadoso proceso de elaboración y maduración le otorgan un sinfín de atributos que han enamorado al mundo. La leche utilizada para su proceso es de la mejor calidad y su creación es muy artesanal.

Además de eso, cuenta con un especial cuidado en su tiempo de maduración; esto, para asegurar la mayor calidad. Adicional, porque aparte de ser delicioso, es un queso que tiene maravillosos nutrientes (Lang, 2023).

De hecho, algunos de los beneficios que han hecho al queso parmesano tan famoso son (Lang, 2023):

• Es uno de los quesos que tiene más bajo contenido de lactosa.
• Es una gran fuente de calcio. Su ingesta te puede ayudar a favorecer la salud de los huesos y la absorción de otros minerales, como el hierro y el zinc.
• Durante su proceso de maduración, las proteínas se descomponen en compuestos más pequeños que el cuerpo puede absorber mucho mejor.

Queso parmesano: uno con mucho cuerpo y personalidad

Dentro de las características que componen o definen al queso parmesano se pueden encontrar las siguientes (Pinero, 2023; Quesos de Europa, s.f.):

Textura y color

Su color es entre amarillo y blanco. Que tenga uno o el otro depende de la alimentación de las vacas; del proceso de maduración y las condiciones que tenga la bodega de almacenamiento.

En cuanto a su textura, suele ser dura y con una consistencia granulada que aumenta con el tiempo de maduración. Por eso, para cortar este queso, es ideal hacerlo de forma triangular.

Sabor y aroma

El sabor de este queso se asemeja mucho al de la nuez. Junto a ello, uno de los atributos más importantes que tiene es que se pueden percibir tres: dulce, salado y amargo; esto genera toda una explosión de sensaciones increíbles cada vez que se mezcla con otros ingredientes.

El sabor dulce es notorio cuando el queso es joven; el salado, a medida que aumenta la maduración; y el amargo, por otro lado, es muy débil. Este último se genera por la fusión con los aromas a hierbas y nuez que tiene este producto (Pinero, 2023; Quesos de Europa, s.f.).

Proceso de maduración

Su tiempo de maduración recomendado es de 12 meses en reposo. Durante este tiempo se debe cuidar la temperatura, la ventilación y la humedad. Es aquí donde se desarrolla su sabor, textura y aroma (Pinero, 2023).

Saca el máximo provecho de este queso en la cocina

Debido a que la cuna de este queso es italiana, es parte primordial de su alimentación; es decir, funciona como si fuera la misma sal. También, se usa dentro de platos fuertes con pasta por su excelente forma de gratinar.

No obstante, esos no son los únicos usos. Estos dependen del tiempo de maduración y crean distintos maridajes. Por ejemplo (Lang, 2023):

• De 12 a 19 meses: tiene un sabor con toques a frutas y yogur. Es suave, por lo que es ideal para ensaladas y platos fríos. También, se puede disfrutar con vinos blancos que sean espumosos.
• De 20 a 26 meses: es un queso mucho más equilibrado. Gracias a eso se puede disfrutar en salsas, postres, sopas y platos fuertes.
• De 27 a 34 meses: aquí encontramos un queso más aromático. Además, se puede percibir un sabor más pronunciado. Por eso, es ideal para disfrutarlo con platos de pasta al horno, postres, frutas y miel.
• 35 a 45 meses: su sabor es intenso. Puede usarse con una buena carne. Adicional, para maridar, es ideal el vino tinto.

Ahora que conoces la historia, y otros detalles, anímate a probar el Queso del Vecchio madurado en tus preparaciones. Todo depende de tu creatividad y lo que quieras lograr. Eso sí, ten la seguridad de que el resultado final será exquisito.

Sin duda, ese toque único que brinda el queso parmesano primero hace que tus platos queden deliciosos. ¡Anímate a utilizarlo y viaja a los sabores más autóctonos de Italia a través de tu comida!